jueves, 3 de diciembre de 2015

Lesiones frecuentes del aparato locomotor

De todos es sabido que la función del aparato locomotor es permitir que nuestro cuerpo pueda moverse. Se compone de huesos, músculos, articulaciones, tendones y ligamentos (podemos mencionar también al cartílago) y, cuando alguno de estos componentes falla se produce dolor y, generalmente, una limitación del movimiento que puede ser más o menos grave dependiendo de la afectación.


Algunos de estos problemas que afectan al aparato locomotor son:

Contusiones: Se producen cuando una parte del cuerpo es golpeada o comprimida pero no se llega a producir herida abierta.

Fracturas: Lesiones de los huesos, que abarcan desde una pequeña fisura hasta una rotura completa.


Condromalacia: Consiste en el desgaste del cartílago articular. La más sonada es la rotular, la cual afecta a la rodilla.

Desgarros musculares: Lesión del tejido muscular producido por la rotura de las fibras que lo componen. En cuanto se producen hay que aplicar hielo de inmediato, luego debemos comprimir la zona y elevarla, mientras se guarda reposo en todo el proceso de curación.


Esguinces: Se trata del alargamiento o de la rotura de los ligamentos que sujetan la articulación (lo más común es que sea el tobillo aunque también los podremos encontrar de muñeca o cervical). Existen 3 grados que se clasifican desde el simple alargamiento hasta la rotura completa.


Tendinitis: Se llama así a la inflamación de la vaina o cobertura del tendón, haciendo que se pegue al tendón. Produce tumefacción, dolor y limitaciones del movimiento.



Tendinosis: Degeneración de los tendones, que se hacen más gruesos y menos elásticos, siendo así más propensos a sufrir roturas.