sábado, 28 de noviembre de 2015

The scientist

Es fin de semana, parece (al menos a mí) que el Sol brilla más, los días son más largos y hace más calor - claro que las estufas ayudan en esto último.
He dormido esta noche lo mismo que los dos últimos días de la semana juntos. Y aún así tengo sueño.
Tras dos semanas haciendo prácticas parece que el horario de funcionario se ha apoderado de mí sistema nervioso y ya me he acostumbrado a entrar a trabajar a las 8 de la mañana.
Y todavía quedan otras 3 semanas. Esto hace que me replantee seriamente mi ciclo del sueño para que en fin de año no tenga que acostarme a las 10 y media de la noche.
Esto es la felicidad.

Pero bueno, el caso es que después de esta semana he decidido recapitular sobre todo lo que he presenciado en estos pocos pero largos días en el hospital.
En general puedo sacar una cosa en claro, algo que tenía claro antes, pero ahora todavía más.
El cáncer es una verdadera mierda.

Para que luego nos quejemos...
Cada día salen noticias y artículos sobre avances en los tratamientos del cáncer y el aumento de la supervivencia de los pacientes. Y eso nos llena de esperanza e ilusión.
Nada más lejos de la realidad.
Todos los avances que se logran en algún laboratorio a más de 5000 km de distancia poca repercusión tiene aquí en el futuro inmediato. El cáncer sigue avanzando, la gente sigue muriendo y esto no va a cambiar en los próximos años.
A pesar de todas esas noticias que las televisiones publican orgullosas (que parece que han descubierto 27 veces la cura contra el cáncer, pero no) los profesores no se cansan de decir que la mayoría de nosotros vamos a tener cáncer por la genética y el estilo de vida. Según el día también puede ser diabetes, esto ya depende del tema por el que vayan.
Claro que los que hemos perdido a la mitad de nuestra familia por cáncer vemos el tema ese de la influencia genética como algo que vale la pena escuchar. Y entonces ya te empiezas a creer eso de que vas a tener cáncer.

Probablemente si se dedicase el dinero a lo que se tiene que dedicar podrían haber encontrado una cura, o al menos haber mejorado los tratamientos. Pero en los temas mafiosos económicos de la sanidad mejor no entrar porque eso da para un grado entero. De 5 años concretamente.

Yo paso mis mañanas en una unidad de cuidados paliativos. Ya sé que no es precisamente el lugar más idóneo para hacer una evaluación sobre el pronóstico de una enfermedad pero es lo que más cerca tengo.
Allí muchos pacientes están ingresados por cáncer. Pero no es solo cáncer. Es cáncer en estadío IV con metástasis en páncreas, hígado, pelo y corazón derecho. Y los hay que tienen más de un cáncer. Ya solo leyendo los diagnósticos te entra un bajón importante, pero con un poco de morfina lo solucionas. Y algo para el paciente también.

Pero no es solo la imagen demacrada que muestran estos pacientes, y el dolor que manifiestan, no solo con el cuerpo sino también con los ojos. Es ver que cada día están peor que el anterior, que ellos también se den cuenta y se lamenten.
Con cada suspiro parece que pierden un poco más las ganas de seguir luchando una batalla que ya saben que no pueden ganar. Porque realmente es así. No es el eslogan de una campaña de recaudación ni de un mensaje en Facebook.
Es que el cáncer va a seguir avanzando, cada día, cada minuto. Y no hay nada que se pueda hacer más que minimizar el dolor y esperar a que termine por provocar un fallo en el organismo que acabe con su funcionamiento.

No es posible imaginar lo que debe ser sufrir eso todos los días sabiendo que lo único que puedes esperar de la vida es que se termine. Llegas a casa sintiéndote un poco imbécil por quejarte de tus problemas, pero es que la vida no es justa. Ni para ti ni para nadie.
Y es todavía menos justa para esos más de 14 millones, sí, millones, de casos nuevos de cáncer que se diagnostican cada año de acuerdo a los datos de la OMS. Según una noticia reciente del periódico "El Mundo", casi la mitad se curan... ¿A qué esperamos para celebrarlo? Casi 7 millones de personas se curan de cáncer cada año y vosotros os quedáis en casa sin lanzar fuegos artificiales ni nada. Ah, pero que las otras 7 millones mueren. Pues vaya.

Mortalidad por tipo de cáncer y sexo en España en 2013 (OMS)


¿Y contra todo esto que puedes hacer? Rezar. O más bien nada (tanto monta, monta tanto). Porque ahora no fumas, no bebes, no comes carnes rojas (solo las amarillas), haces ejercicio todos los días... y te aparece un cáncer. Y por mucho factor de riesgo que se evite nadie está a salvo de tenerlo. Además es probable que muchos factores de riesgo para la aparición de cáncer aún no se hayan descubierto (no olvidemos que el tabaco en su día era considerado bueno para la salud).

Personalmente no creo que evitar TODOS los factores de riesgo para el cáncer sea una buena opción (más que nada porque mi dieta diaria se basa en pasta y carnes rojas, con un 0% de materia vegetal y frutal).
Más bien todo lo contrario, olvidarse de todo eso que se considera factor de riesgo, siempre intentando tener un estilo de vida relativamente sano. Porque si empiezas a vivir evitando todos los riesgos, te habrás olvidado de vivir.